El futuro de Musk en el gobierno de Trump: incertidumbre y especulaciones
3 de abril de 2025
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha comentado a su entorno más cercano que Elon Musk, CEO de SpaceX y Tesla y una de sus figuras clave en esta segunda administración, podría alejarse del foco público en las próximas semanas. Sin embargo, la Casa Blanca ha restado importancia a estos reportes.
Según informaron este miércoles el portal Político y la cadena ABC, Trump ha compartido con miembros de su gabinete que Musk dejará su rol activo en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), entidad clave en la ejecución de recortes del gasto federal, una de las promesas de campaña del mandatario.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, desestimó la información publicada por Político, calificándola de "basura". En la plataforma X, Leavitt afirmó que "Musk y el presidente Trump han declarado públicamente que Elon dejará el servicio público como empleado especial del Gobierno cuando complete su increíble trabajo en el DOGE".
Pese a los rumores, fuentes cercanas aseguran que Musk podría mantenerse como un asesor informal y seguir participando ocasionalmente en eventos oficiales. "Quien piense que Musk va a desaparecer de la órbita de Trump se está engañando a sí mismo", comentó una fuente anónima a los medios.
El papel del empresario en la administración ha sido objeto de debate desde que Trump asumió nuevamente la presidencia. Su participación en el gobierno ha generado tanto apoyo como controversia, especialmente tras los recortes de presupuesto que han llevado al cierre de agencias federales y al despido de miles de empleados.
Además, la derrota del juez conservador Brad Schimel en las recientes elecciones para el Tribunal Supremo de Wisconsin ha sido vista como un revés para Trump y sus aliados. Musk, a través de America PAC, donó aproximadamente 20 millones de dólares para respaldar la candidatura de Schimel, pero el resultado desfavorable ha incrementado las críticas sobre su influencia política.
En paralelo, las protestas contra los recortes presupuestarios han afectado la imagen de Musk, con ataques dirigidos a concesionarios y vehículos Tesla en distritos golpeados por las medidas del DOGE. Esta creciente presión podría ser un factor clave en su posible decisión de reducir su participación en la administración.
A pesar de las especulaciones, no está claro si Musk abandonará por completo su rol en el gobierno o si su influencia continuará desde un papel menos visible. Por ahora, la incertidumbre sobre su futuro en la administración de Trump sigue abierta.
